- La asesoría especializada y los esquemas flexibles son clave para que más empresas accedan al financiamiento.
La falta de acceso al crédito es un factor que limita el crecimiento de las micro, pequeñas y medianas empresas en México donde, en 2023, sólo el 23.5% de las Pymes y apenas el 10% de las microempresas obtuvo financiamiento, lo cual es preocupante.
De acuerdo con Ernesto Borbón, director de Banca Pyme de BanBajío, dichas cifras fueron emitidas por el INEGI, por lo que la clave para convertir el crédito en una herramienta efectiva de crecimiento está en identificar el tipo de financiamiento que se ajuste al flujo operativo y al proyecto de cada empresa.
“Lo importante es tener un financiamiento adecuado que empate con las necesidades y el proyecto, y así acompañar al empresario para que tenga el crédito correcto y compatible con sus flujos”, expresó.
El directivo explicó que las empresas formalizadas, con estructura administrativa, estados financieros en orden y claridad en sus metas, son las que más fácilmente acceden a crédito, ya que operar bajo una economía bancarizada mejora la percepción de riesgo y abre mayores posibilidades de financiamiento.
Entre las herramientas más utilizadas por las Pymes, dijo, están las terminales punto de venta, plataformas digitales de cobranza, líneas de crédito revolvente y esquemas para adquisición de activos, diseñados según la etapa de desarrollo y el giro de cada negocio.
Por su parte, Édgar Cavazos, director Regional Noroeste de BanBajío, comentó que la resistencia inicial al endeudamiento es común, aunque puede superarse con asesoría adecuada, relaciones de largo plazo y propuestas financieras hechas a la medida.
“El apalancamiento siempre crea temor, de ahí la importancia de hacer trajes a la medida para cada empresa, para que puedan crecer con el respaldo de una relación sólida con la institución financiera”, afirmó.
Cavazos destacó que Tijuana reúne condiciones únicas para el desarrollo de las Pymes, ya que combina una economía pujante con visión binacional, lo que ha atraído a empresarios de otras entidades del país que reconocen el potencial de crecimiento de la región.
Finalmente, ambos directivos coincidieron en que el crédito bien aplicado puede ser una palanca de expansión, siempre que se acompañe de orientación profesional y una estructura financiera que permita al negocio sostener su desarrollo sin comprometer su estabilidad.