- El debate sobre el control de armas en Estados Unidospodría debilitar las aspiraciones reeleccionistas del presidente Donald Trump, pues la NRA endureció su postura en contra.
Los miembros de ambas cámaras del Congreso están en receso hasta septiembre, pero ya se ve posible que analicen nuevas medidas para la venta de armas, pero lejos de las acciones drásticas que se exigen en varios sectores, en parte por la inamovible posición de la Asociación Nacional del Rifle (NRA), quienes han sugerido hasta que podría poner en peligro su reelección si se autorizan las restricciones.
- En particular se pretende endurecer la revisión de antecedentes de quienes adquieren armas de fuego, medidas que formarían un proyecto que se discutiría el próximo septiembre.
Desde 2017, la NRA fijó que se mantiene centrada en su misión de fortalecer la Segunda Enmienda constitucional que permite a los estadounidenses defenderse a sí mismos, a sus familias y a sus comunidades de actos de violencia.
La asociación respondió en esa ocasión a los reclamos de control tras la masacre del 1 de octubre de 2017 en Las Vegas, durante un festival de música country, con saldo de 59 muertos y 851 heridos.
Ahora, en 18 tuits, refrendó su inamovible posición, llamó a identificar la raíz del problema, repitió que aquellos que puedan dañarse a sí o a otros no deben acceder a armas, pero tras la evidencia debida, para no dañar los derechos de alguien.
Y advirtió que desafortunadamente, los candidatos presidenciales de inmediato se hicieron de los medios para politizar las tragedias de El Paso y Dayton, y demonizar a la NRA y sus cinco millones de miembros respetuosos de la ley.
- Las acciones del Congreso estadounidense podrían partir del proyecto de ley aprobado el pasado febrero por la Cámara de Representantes, de mayoría demócrata, pero que el líder de la mayoría del Senado, el republicano Litch McConnell, se ha negado a votar.