La organización que se ostenta como defensora de los propietarios de vehículos irregulares, que cuenta con 80 mil afiliados en Baja California, se manifestó en contra del censo vehicular promovido por el Gobierno del Estado.
Aseguran que será un «arma de doble filo», al recabar los datos de los autos que circulan sin documentos.
Piden sostener una mesa de trabajo con las autoridades, para promover en conjunto un programa de regularización flexible para los automovilistas.
Los representantes nacionales de Anapromex, señalaron que sólo el 15 por ciento de su padrón podría cumplir con los requisitos para entrar a un modelo de regularización apegado a las actuales
pautas de importación de los vehículos.