- ¿Conoce usted algún ex Presidente de México que luego de haber concluido su mandato esté viviendo en la pobreza?
¿Conoce usted algún ex Presidente de México que luego de haber concluido su mandato esté viviendo en la pobreza? El único que de acuerdo con la historia fue don Benito Juárez García, quien se caracterizó por vivir siempre en lo que llamó “justa medianía”, si mal no recordamos.
Otros que vienen a nuestra mente son Carlos Salinas de Gortari -PRI- y Vicente Fox -PAN-. El primero con fama de ser el más rico de todos los gobernantes que hemos padecido. Hoy se da el lujo de hacer gala de sus riquezas, viajando por todo el mundo y haciendo negocios con aquellos que favoreció durante su gestión gubernamental.
En cuanto al segundo, es bien sabido que al asumir la Presidencia de México sus empresas ligadas con el sector agropecuario se encontraban prácticamente en quiebra. Sin embargo, aprovechando su posición aprovechó los beneficios que brindó el Fobaproa a muchos empresarios y políticos que absorbieron sus deudas, resolviendo así sus problemas de tipo financiero, los de sus familiares, incluida su esposa, débitos que hoy estamos pagando todos los mexicanos.
El tema vino a cuento al enterarnos que la bancada en el Senado de la República del Partido Movimiento Ciudadano presentó hace días una iniciativa de reforma legislativa destinada a eliminar las cuantiosas pensiones y privilegios que disfrutan los ex mandatarios. El documento, según información manejada por Organización Editorial Mexicana, adiciona un segundo párrafo al artículo 83 de la Constitución Política de México con el único propósito de “eliminar de manera explícita las pensiones de retiro que reciben, así como otros beneficios en materia social y administrativa”.
Información difundida sobre el tema indica que algunos de los ex cuentan con un ejército de asesores, ayudantes, secretarias, choferes, guardias de seguridad para ellos y sus familiares y vehículos; privilegios que tienen un costo millonario pagado por el Gobierno federal.
Entre los argumentos esgrimidos por los senadores de Movimiento Ciudadano destaca que el acuerdo presidencial que autoriza dichas prestaciones “no puede estar por encima de lo establecido por el artículo 123, apartado B, fracción XI de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos”, en materia de seguridad social para los trabajadores de la Unión, por lo que su naturaleza puede considerase como más que “irregular y extralegal”.
Por otra parte, resulta totalmente injusto que los ex Presidentes sigan gozando de privilegios millonarios -sin tener necesidad alguna-, mientras más de 50 millones de mexicanos viven en la pobreza.
Amigo lector: ¿Usted cree que Peña Nieto merece su pensión para vivir luego de su corrupto mandato?
La Voz de la Frontera