a chaqueta que Jack Nicholson vistió en el filme de culto y terror «Shining» (El resplandor) fue subastada por 19 mil euros (23 mil dólares) por la casa italiana Aste Bolaffi que este martes ofreció numerosos objetos del genio del cine Stanley Kubrick.
En total fueron ofrecidos online 54 lotes provenientes de la colección de Emilio D’Alessandro, asistente y amigo del cineasta por casi 30 años.
El listado oficial incluía piezas legendarias como la chaqueta granate que Nicholson usó para su premiado papel de Jack Torrance en el mítico filme The Shining (El resplandor) de 1980.
La prenda fue elegida por la responsable del vestuario, Milena Canonero, ganadora del Oscar, por sugerencia del propio Nicholson, que la vistió durante casi todo el rodaje.
Según el catálogo, el precio de la chaqueta partía de 10 mil dólares.
Era suficiente que se pusiera la chaqueta de pana color granate que le había comprado Milena, un poquito de maquillaje, una peinada al mechón y listo: era Jack TorrenceEmilio D’Alessandro, asistente y amigo de Stanley Kubrick
La diseñadora adquirió varias chaquetas para la filmación de la película y era uno de los objetos más costosos de la subasta.
El abrigo de paño azul oscuro y el reloj usado por Tom Cruise para Eyes wide shut, el último filme de Kubrick, lanzado en el festival de Venecia en 1999, no encontraron comprador.
Entre carteles publicitarios de sus filmes, anotaciones, mensajes y bolsas personales y un corte con dos fragmentos de la emblemática película antibélica Paths of Glory (Senderos de Gloria) de 1957, con un mensaje del director de cine dirigido a Emilio, la casa de subastas italianas recaudó en total 90 mil euros.
Un fragmento original de la película The Shining, un objeto considerado único, ya que el cineasta ordenaba quemar todos los cortes que sobraban de sus filmes al término del montaje final, fue vendido por 6 mil 500 euros.
Algunos artículos curiosos, como los sellos usados para la producción de uno de los filmes más perturbadores de la historia del cine, La naranja mecánica, realizado en 1971, no fueron adjudicados, al contrario de los carteles publicitarios con los que la película fue promocionado.
«Logramos llegar al público medio estadounidense con objetos que estaban escondidos en una finca perdida italiana. Es un capítulo nuevo para nosotros», declaró satisfecho Filippo Bolaffi.
D’Alessandro, de 76 años, trabajó 28 años como asistente personal de Kubrick, de 1971 a 1999, año de la muerte del director, con el que logró establecer una relación de confianza y amistad profunda, tras haber sido conductor, mensajero, secretario, administrador de la finca y sobre todo la persona que lo conectaba con el mundo externo.
Su experiencia fue contada por el director italiano Alex Infascelli en el documental sobre la vida de d’Alessandro titulado S for Stanley, premiado en el 2016 como mejor documental europeo.
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