Tras el reciente alto al fuego alcanzado entre Israel y Hamás, el expresidente estadounidense Donald Trump ha puesto su mirada en un nuevo objetivo diplomático: replicar ese avance en el conflicto entre Rusia y Ucrania.
El exmandatario considera que los mecanismos de mediación utilizados en Oriente Medio podrían servir como base para impulsar una tregua en Europa del Este. Con ese propósito, Trump se prepara para reunirse con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski en Washington, donde abordarán posibles rutas hacia la paz y estrategias para frenar la escalada bélica.
Durante su discurso ante el Parlamento israelí, Trump destacó que su labor diplomática “apenas comienza” y adelantó que su siguiente meta será promover la estabilidad en la región rusa, en lo que calificó como un esfuerzo global por reducir los focos de conflicto.
Por su parte, Zelenski reconoció que “la agresión rusa sigue siendo la principal fuente de desestabilización global”, y expresó su esperanza de que el impulso generado por los acuerdos en Gaza sirva como ejemplo para avanzar hacia una solución negociada en Ucrania.
Obstáculos y nuevas estrategias
El panorama, sin embargo, presenta múltiples desafíos. Rusia ha rechazado en reiteradas ocasiones la posibilidad de entablar negociaciones directas con Kiev, incluso bajo mediación internacional. Pese a ello, Trump ha insistido en mantener el diálogo abierto y en fortalecer la posición defensiva ucraniana.
En ese sentido, el exmandatario ha sugerido la posibilidad de suministrar misiles de crucero Tomahawk a Ucrania, una medida que podría modificar el equilibrio militar, aunque también generaría tensiones diplomáticas con Moscú.
Trump cuenta con el apoyo de su enviado especial Steve Witkoff, quien participó en las conversaciones que facilitaron la tregua en Gaza y ahora busca aplicar esa experiencia al escenario ucraniano.
Camino incierto hacia la paz
Aunque el optimismo en Kiev ha crecido tras los recientes avances diplomáticos, las diferencias entre Moscú y Ucrania siguen siendo profundas, y la viabilidad de un alto al fuego dependerá de la disposición real de ambas partes para ceder terreno político y militar.
La reunión prevista para este viernes entre Trump y Zelenski podría marcar el inicio de una nueva fase en los esfuerzos por estabilizar Europa del Este, pero el reto de trasladar el modelo de Gaza a Ucrania aún se vislumbra complejo y lleno de tensiones.