Los festejos por el Grito de Independencia 2025 se vieron empañados en diversas regiones del país, donde al menos seis estados confirmaron la cancelación o modificación de ceremonias ante hechos de violencia recientes, amenazas o como acto de respeto a víctimas.
En la Ciudad de México, la alcaldía Iztapalapa suspendió las celebraciones populares y sólo se llevó a cabo una ceremonia cívica e izamiento de bandera monumental.
En el Estado de México, el municipio de Xalatlaco canceló sus actos patrios tras la balacera que dejó cuatro personas muertas días atrás.
En Michoacán, los municipios de Uruapan, Peribán y Zinapécuaro suspendieron sus actividades, mientras que en Tocumbo se realizaron con modificaciones.
En Oaxaca, localidades como Asunción Ocotlán, San Juan Bautista Guelache, Santa María Yolotepec, Santiago Yosondúa y Zapotitlán Palmas cancelaron los festejos, y en otros municipios se trasladaron a sedes alternas.
En Veracruz, Coahuitlán, Coxquihui, Zozocolco de Hidalgo y Cerro Azul suspendieron las actividades del 15 y 16 de septiembre.
El caso de Sinaloa resultó emblemático: por segundo año consecutivo, se cancelaron los festejos públicos en varios municipios, sustituidos por actos cívicos y con restricciones en otros puntos del estado.
De acuerdo con UnoTV, estas decisiones obedecieron principalmente a temores de inseguridad, hechos violentos recientes o como muestra de solidaridad con víctimas, lo que refleja una creciente tensión entre las demandas ciudadanas de seguridad y las celebraciones patrias que históricamente han reunido a las comunidades.