En el “sexenio del empleo” —denominado así por el presidente Enrique Peña Nieto en noviembre del año pasado durante una Asamblea General Ordinaria del IMSS— el 74% de las nuevas plazas no pagan más de 3,842 pesos.
La disminución de la tasa de desempleo, uno de los logros más destacados por el ejecutivo federal y los integrantes de su gabinete en eventos públicos, tiene pros y contras, de acuerdo con un análisis del Mercado Laboral en 2017 de HR Ratings una calificadora de valores.
Datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) apuntan que el total de trabajadores formales se ubicó en 19,418,455 personas en 2017, es decir una 3.4 millones de asegurados desde 2012 a la fecha.
El crecimiento medio anual durante este periodo fue de 3.87% y fueron las industrias de transformación o manufactura, las extractivas, de construcción y la eléctrica y suministro de agua potable en las que más empleo formal se generó.
Pero al analizar los niveles de salario de la población ocupada es notable que “la generación ha estado enfocada en rangos salariales bajos y esto explica que gran parte del incremento de la fuerza laboral”, apuntó Jordi Juvera, asociado de economía de HR Ratings.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) 34% de la población ocupada percibe de uno hasta dos salarios mínimos es decir una percepción que fluctúa entre 1,921 a 3,842 pesos mensuales; y 26% se ubica en el nivel salarial de dos hasta tres minisalaros, es decir de 3,842 a 5,763 pesos.
Las personas que ganan lo equivalente al salario mínimo conforman 19% de la población ocupada, es decir hasta 1,921 pesos mensuales; que superan al 16.2% de los que ganan de tres a cinco salarios mínimos es decir de 5,763 a 9,605 pesos; y los que superan los cinco salarios mínimos son 5.8% de los trabajadores mexicanos.
Específicamente en lo referente a los 3.6 millones de empleos generados de 2012 a 2017, 2.6 millones, o el 74%, fueron empleos con más de un salario mínimo o hasta dos.
Un mayor ingreso salarial de los trabajadores aumentaría el consumo de éstos y por tanto la demanda de bienes y servicios, lo que generaría un crecimiento económico del país.
“Resulta difícil observar crecimientos sostenido a más de 2.5% y esto podría ser relacionado en parte porque los salarios son bajos”, apuntó Felix Boni, director general de análisis de la calificadora.
Los trabajadores actualmente tienen un bajo poder de negociación con las empresas, la mayoría de las empresas son pequeñas y medianas y el tamaño de la informalidad evita que más trabajadores se especialicen o generen experiencia valiosa, factores que evitan el aumento de salarial, de acuerdo con Marcelo Delajara director del Programa de Crecimiento Económico y Mercado Laboral del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY).
Pero tanto el efecto de la disminución de la tasa de desempleo como los bajos salarios también pueden atribuirse a un efecto relacionado al ciclo económico, explica Delajara.
“Se trata de una economía particularmente golpeada a fines de 2008 y 2009 durante la crisis, cuando eso sucede tienes una economía por mucho tiempo por debajo de la producción de su potencial. La creación de empleo no tiene mucho que ver con lo que haga un gobierno u otro sino en donde está la economía en relación a su potencial y durante este periodo probablemente hasta el año 2015 y 2016 la economía estuvo produciendo por debajo de su potencial con lo cual había holgura en el mercado laboral, es decir todas aquellas personas que querían encontraron trabajo, pero a salarios bajos”.
Lo que sí se puede atribuir al gobierno y que en cierta medida tuvo un efecto positivo fueron las medidas para reforzar la formalización de los empleos, pese a que el crecimiento ha sido “modesto”, advierte el especialista.
“Al final del día la tasa de informalidad se ha reducido en apenas 3 o 4 puntos porcentuales lo cual es insuficiente para la gravedad de problema que tenemos con la informalidad, acciones del gobierno el Régimen de incorporación fiscal el haber escaldo las inspecciones en las ordenes de trabajo es una estrategia que puede afectar la informalidad muy lentamente2, señaló.
De acuerdo con el análisis de HR Ratings De 2012 al presente la tasa de crecimiento del empleo formal se encontró por encima del PIB, pero a pesar de esto, los niveles de salarios altos han caído, pero las remuneraciones a los asegurados del IMSS continuaron creciendo.