Andrés Manuel López Obrador ha decidido romper con una tradición de años de colgar en cada oficina gubernamental una fotografía del presidente.
Según el mismo presidente dijo, esto se debe a la política de austeridad implementada en su gobierno.
Y es que tan sólo la fotografía oficial del ex presidente Enrique Peña Nieto tuvo un costo total de más de 2 millones de pesos, entre los que se incluía la sesión, impresión, montaje y reproducciones oficiales de la propia fotografía.
«Es el respeto a la investidura, pero no la promoción de la persona”, señaló al respecto el vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez Cuevas.
Como Jefe de Gobierno (2000-2005) AMLO tampoco tuvo una fotografía oficial.
En ese tiempo López Obrador decidió usar una imagen de Benito Juárez y parte de la frase del Benemérito de las Américas:
“Los funcionarios públicos no pueden disponer de las rentas sin responsabilidad. No pueden improvisar fortunas, ni entregarse al ocio y a la disipación, sino consagrarse asiduamente al trabajo, disponiéndose a vivir en la honrada medianía”.
Sin embargo, el presidente hizo una excepción para la Secretaría de la Defensa Nacional(Sedena) la cual le pidió una fotografía en su calidad de Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas para ubicarla al tope de los escalafones castrenses en las zonas y regiones militares del país, por encima de generales y coroneles.
La imagen fue tomada en el despacho presidencial, en Palacio Nacional, y estará en las instalaciones de la Sedena, aunque está en proceso de entrega.
“Es una foto buena, profesional”, afirmó el vocero de la Presidencia, quien aclaró que no tuvo ningún costo porque fue tomada por el propio equipo de Comunicación Social.