El hartazgo de la sociedad contra el actual gobierno juega a favor de Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Anaya, quienes al representar figuras que van en contra del sistema serían los protagonistas de la elección en puertas; no obstante, los papeles se invirtieron y ahora el candidato del PAN-PRD-MC es visto como una amenaza mayor para el sistema. Mientras que José Antonio Meade enfrenta un panorama complicado para darle al PRI otro sexenio al frente del país.
Ésta es la lectura que realizaron los analistas Jesús Silva-Herzog Márquez, Javier Tello, Carlos Puig y León Krauze, durante su participación en el Value Investing Forum 2018.
AMLO dejó de ser un personaje amenazante: Silva-Herzog
A diferencia de lo que sucedió en la elección presidencial del 2006, cuando la campaña de Andrés Manuel López Obrador era vista como la mayor amenaza para el sistema, en el actual proceso electoral la figura que luce hoy más amenazante para el régimen no es la del fundador del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), sino la de Ricardo Anaya, candidato de la coalición Por México al frente, advirtió Silva-Herzog Márquez.
De acuerdo con el analista político, el tabasqueño ha aprendido, tras las experiencias de 2006 y 2012, a disminuir el factor riesgo que pesaba sobre su persona y por el cual era señalado como un personaje que pudiera causar daño a México, algo que consiguió debido al cambio de discurso que tuvo hacia un enfoque más moderado.
En el mismo tono se expresó el académico Javier Tello, quien sostuvo que Andrés Manuel López Obrador está en una posición privilegiada en la elección debido a que el hartazgo que tiene la gente pone las cosas dentro de su territorio.
“Está elección se presenta como un punto de inflexión ya que la gente hoy está buscando cambios radicales, un tanto como lo que sucedió en el 2000, por eso quien pretenda ganarle a AMLO debe hacerlo bajo sus condiciones”, comenta Tello.
De acuerdo con los especialistas, el candidato que se presenta ahora mismo como el capaz de dar mayor batalla a AMLO es Anaya. Esto debido a que es un candidato con un rostro fresco, además de que en su conjunto los partidos que integran a su coalición gobiernan estados que aportan votos importantes, como Puebla o Veracruz.
Asimismo, el hecho que Anaya se haya enemistado con la propia Presidencia de la República, debido a las investigaciones que ha hecho en su contra la PGR, lo han colocado como un personaje que puede ser visto por la gente como antisistema, lo cual puede resultar positivo para el panista.
Finalmente, respecto al candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), José Antonio Meade, los especialistas señalaron que, si bien la elección aún no está terminada, luce muy complicado que el exsecretario de Hacienda pueda levantarse.
“El PRI no tiene la más mínima posibilidad de ganar porque a lo que nos estamos enfrentando es a una elección de cambio, la gente está molesta con lo hecho por el partido que está al frente, y Meade representa la triple continuidad: la del mismo partido, la de Peña Nieto y la de régimen actual”, precisó Tello.