En un emocionante enfrentamiento en Estambul, el Manchester City logró romper la maldición que lo perseguía en competiciones europeas al derrotar al Inter de Milán por 1-0 en la final de la Champions League. Fue un gol de Rodri Hernández en el minuto 68 el que aseguró la victoria para el equipo inglés.
A pesar de la lesión sufrida por Kevin de Bruyne en la primera parte, el Manchester City encontró la manera de superar al Inter y llevarse el preciado título. El técnico Pep Guardiola, quien ya había ganado la Champions con el Barcelona en dos ocasiones, consiguió su primera victoria en el torneo fuera de su antiguo club.
El Inter planteó una estrategia defensiva que complicó las cosas para el City durante gran parte del partido. Sin embargo, Rodri se convirtió en el héroe inesperado al marcar el gol decisivo. Aunque no es conocido por ser un goleador frecuente, el centrocampista español aprovechó un pase de Bernardo Silva para fusilar al portero camerunés André Onana y poner en ventaja a su equipo.
El Inter tuvo una oportunidad clara para empatar el partido, cuando un remate de Demarco dio en el larguero y el rebote fue bloqueado por su compañero Lukaku. Sin embargo, el destino no favoreció al equipo italiano en esta ocasión.
Esta temporada europea ha sido especialmente desafortunada para los equipos italianos, ya que la Roma y la Fiorentina también perdieron en finales de competiciones europeas. Sin embargo, el Inter tendrá que esperar para ganar su cuarta Champions League, mientras que el Manchester City celebró su histórico triunfo en Estambul.