Al arrancar su tercera campaña presidencial, Andrés Manuel López Obrador, lanzó un mensaje al presidente de Estados Unidos, Donald Trump: «Ni México ni su pueblo será piñata de ningún gobierno extranjero».
Desde la ciudad fronteriza, el abanderado de la coalición Morena-PES-PT no descartó la posibilidad convencer a Donald Trump de «su equivocada política exterior y en particular de su despectiva actitud contra los mexicanos. Vamos a ser muy respetuosos del gobierno de Estados Unidos, pero vamos a exigir también respeto a los mexicanos. Ni México ni su pueblo va a ser piñata de ningún gobierno extranjero».
En una Plaza Juárez atiborrada y arropado por dirigentes de Morena, PT, PES y sus algunos de sus coordinadores de dijo dispuesto a que en aras de una buena relación pondrá sobre la mesa el programa de desarrollo para impulsar el crecimiento, generar empleos y bienestar para enfrentar de manera conjunta las causas que originan la migración, inseguridad y violencia.
«Que se oiga bien y se oiga lejos, no es con muros ni con el uso de la fuerza como se resuelven los problemas sociales ni los asuntos de seguridad. Los problemas se resuelven con desarrollo y bienestar», afirmó.
Aunque expresó que no está en contra del Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN), consideró que sería conveniente que la firma de nuevos acuerdos se realice luego de las elecciones presidenciales del 1 de julio para que haya equidad y se busquen consensos para no afectar a sectores productivos de México.
Y propuso incluir en la renegociación la definición de salarios y el tema migratorio.
El tabasqueño insistió en suspender la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM). Pero, adelantó, que continuarán los acuerdos con aquellas compañías a las que se les han asignado contratos y que haya garantías del gobierno para proteger las inversiones de Afores.
«Se actuará con legalidad, certidumbre y no se permitirá la corrupción», sostuvo.
López Obrador también lanzó su propuesta económica y seis puntos para la zona franca de 3 mil kilómetros de frontera:
1. Recorrer aduanas hacia el Sur, de 20 a 30 km de la línea divisoria.
2. Reducir el ISR al 20% en la frontera.
3. El IVA será de 8% en la frontera.
4. Se reducirán impuestos especiales a producción, servicios y reducir tarifas de diésel y electricidad.
5. Desde el 1 de enero de 2019, se aumentará el salario mínimo al doble en la franja fronteriza.
6. Plan de desarrollo urbano con ordenamiento de uso de suelo para escriturar predios.
EL UNIVERSAL