- Mientras en 2016 los programas sociales llegaban al 67% de hogares en pobreza extrema, para 2020 el alcance fue de 43%; en contraste, apoyos a hogares más ricos pasaron del 3% al 7%, según un análisis del INDESIG.
Aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador repite una y otra vez en que en su gobierno “primero los pobres”, la realidad es que, según el Proyecto de Presupuesto de Egresos 2022, esta máxima está lejos de cumplirse, alertó el Instituto de Estudios sobre Desigualdad (INDESIG).
De la mano con la Alianza Contra la Desigualdad, llevaron a cabo un análisis del proyecto enviado por el ejecutivo a la Cámara de Diputados, el cual reveló que mientras en 2016 los programas sociales llegaban al 67% de los hogares en extrema pobreza, para 2020 el alcance de la política social apenas llega al 43% de estas familias. En contraste, los apoyos que reciben los hogares más ricos del país, es decir, quienes se ubican en el decil 10, han pasado del 3% al 7%.
¿Cómo se explica esto? Principalmente por el rediseño de la política social y la austeridad a la que se ha sometido a ciertos programas sociales, específicamente aquellos especializados en pobreza extrema.
“En términos de desigualdad podríamos decir que para 2022 el gasto planteado es menos redistributivo de lo que era en 2021, (porque) el presupuesto cada vez lucha menos contra la desigualdad “, subrayó Máximo Jaramillo-Molina, director general de INDESIG.
“Si queremos un presupuesto que priorice a las personas en situación de pobreza, este no es el camino”.
Para el 2022 tanto los programas prioritarios del gobierno federal como los programas sociales tendrían un incremento en su presupuesto.
A los proyectos prioritarios se propone un 37% más de recursos, destacando la Guardia Nacional y el Tren Maya, ambos con 74% adicional al aprobado el año pasado.